Reunión Trimestral

Otoño

¡Hola familias!

Con esta entrada queremos mostraros el acercamiento que ha tenido nuestro aula de bebés a la estación de Otoño.

En esta etapa, los bebés comienzan a descubrir el mundo que les rodea a través de los sentidos.

En la Escuela pretendemos que los niños observen, y entren en contacto con el Otoño, entendido como parte del medio físico que les rodea.

De este modo se enriquece el tipo de experiencias que la Educación Infantil aporta a los niños, generando nuevas inquietudes e intereses en ellos.

El Otoño entró en la escuela y salimos del aula a reconocer el olor de esta estación y sentir la textura de las hojas secas.

Escucharon muy atentos al duende del Otoño, que nos contó el cuento de “Las tres hojitas” y jugamos con pompas de jabón.

Nuevas incorporaciones

Vamos a finalizar el mes de Noviembre con dos nuevas incorporaciones.

Podría decir que han sido de las más complicadas, pero también han ayudado mucho los demás compañeros manteniendo tranquilidad en momentos de llantos.

Aitana ha llegado con mucha fuerza y le ha costado la separación de su madre, pero poco a poco ha conseguido relajarse y me ha dejado jugar con ella, robándole pequeñas sonrisas.

La última incorporación fue María, resultando éste proceso de adaptación más complicado para su madre que para ella, que se va adaptando con facilidad.

Una relación educadora-niño de confianza permite al niño sentirse tranquilo y satisfecho consigo mismo y con el mundo que le rodea. A día de hoy comenzamos a ver momentos tranquilos donde todos juegan y las más mayores del aula comienzan a interactuar.

El movimiento

Hola familias...

Ya han pasado dos meses desde que comenzaron las adaptaciones de los primeros niños del aula. Poco a poco se han ido incorporando y adaptándose a nuevas personas (han pasado de estar con la familia a estar con Ana o conmigo durante 7 horas al día), a los nuevos ritmos que se han ido ajustando a partir de los que traían de casa y a los nuevos espacios.
  

De este último punto quiero hablaros en esta entrada. Si habéis observado con tranquilidad la disposición del aula , todo está dividido en espacios muy diferenciados.

Por una parte tenemos la mesa, donde colocamos las tronas a la hora de comer y también la utilizamos para alguna actividad de pintar con las manos.
  

Al fondo tenemos las mecedoras y la mesa camilla. Suele ser una zona destinada para dar biberones con la tranquilidad que se necesita para este momento.
  

La zona del tapiz y la barra es la más importante durante esta etapa, ya que a partir de aquí los niños van a pasar de estar tumbados boca arriba a voltearse, de estar tumbados boca abajo a girar sobre si mismos. Comenzarán a levantar el culete y trabajarán para colocarse en posición de gateo, etc.

Una vez conseguido ésto, ellos decidirán si ya quieren sentarse o prefieren continuar investigando y ponerse de pie con ayuda de la barra o módulos colocados estratégicamente para ello.

A lo mejor algunos pensáis que lo lógico y  habitual es sentar al niño antes de que pueda hacerlo por sí mismo, incluso queréis enseñarle a hacerlo y le colocáis en esta posición rodeado de mil cojines. Pero la verdad es que los niños no necesitan que nadie ni nada les enseñe a sentarse o andar. Ellos solos, y si disponen de libertad de movimiento en el suelo, serán capaces de hacerlo. De esta manera respetaremos el ritmo evolutivo de cada niño

Es cierto que en los comercios podemos ver muchos productos que venden para sentar a los niños, pero...¿los necesitan de verdad? La respuesta es que no, ya que en vez de favorecerlo, lo dificulta y le resta al niño muchas experiencias enriquecedoras. Si el bebé no sabe sentarse por sí mismo, significa que su cuerpo (espalda, pelvis..) no están preparadas para hacerlo. Así que familias... suelo, suelo y mucho suelo para los ratitos de juego solos o con vosotros o con los hermanos y... tranquilos que todo llega, pero a su debido tiempo.

¿Por qué no debemos forzar posturas?

Vuestros hijos necesitan estar en continuo movimiento, pero movimiento en libertad. Si les obligáis a una posición "no cómoda" y les poneís ropa que impide el movimiento, no pueden volver a otra que les resulte más cómoda por sí mismos y tienen que recurrir al adulto continuamente.

A partir de ahora cada día os recordaré que debéis dejar a vuestros hijos que vivan las experiencias que el suelo les puede dar. No les cojáis de las manos para andar, dejad que sean ellos quienes investiguen si pueden soltarse solos y pasar de la mesa a la silla cercana y  ponerles ropa cómoda.
Ellos no hablan, pero nosotros nos tenemos que mantener en un papel de observadores y proporcionarles lo que necesitan, LIBERTAD DE MOVIMIENTOS.

Posición boca arriba, en la que comienzan a votearse de un lado a otro.

Pasan de la posición de boca arriba a boca abajo y comienzan a girar sobre sí mismos.

Inicio de la posición de gateo.

Gateo.

Gateo superando algunos módulos que suponen un obstáculo.

Posición de caballero. Se prepara para ponerse en pie.